El Milán empata en San Siro ante el F.C. Barcelona (1-1)

Robinho gol contra el Barcelona

Con un Kaka’ que empieza a ser mejor y un Robinho, que por momentos se mostró lúcido y en otros muy errado, el Milán obtuvo un empate en casa ante una oncena Culé que colocaba a Lionel Messi de nuevo como titular, después de su lesión.

Los dirigidos por el argentino “Tata” Martino visitaban Italia para enfrentarse a una escuadra Rossonera que si bien es cierto, no van del todo bien en la Serie A, jugaban en San Siro, capital del fútbol mundial donde el número 12, no dejo de sentirse a lo largo de los 90 minutos.

Por su parte, Allegri lo tenía claro: Jugar al contraataque, esperando un robo de balón que terminara en una sorpresa para la zaga blaugrana. Tal estrategia, no era la mayor de las novedades, pues, en la actualidad, la mayoría de los equipos que se enfrentan al F.C. Barcelona emplean el mismo método.

Ante la afición contraria y un sistema de juego que cerraba sus posibilidades, los culé se encaminaron en el partido siguiendo las mismas normas que rigen su filosofía, control, “tiki, taka” y recuperación inmediata de la esférica en caso de perderla.  No obstante, serían los locales quienes se adelantarían en el marcador con un gol de Robinho a penas a los 9’ minutos de haber comenzado el compromiso.

Fieles a su estilo, los catalanes dominaron la posesión del balón y aplicando sus más profundos fundamentos futbolísticos, recuperaron un balón en el medio de la cancha, tras un error en el centro del campo de los italianos y un pase preciso de Andrés Iniesta habilitaría en su totalidad al astro Lionel Messi, quien, con posibilidad de definir directamente al arco, decidió deslumbrarnos una vez más, quitándose a un defensa y aguantando la carga de otros dos que venían por él, terminando la jugada con un pase a la red que sería imposible para Amelia, al 23’.

La segunda mitad que estuvo cargada por imprecisiones, por parte de uno y otro,  algunas llegadas muy leves del F.C. Barcelona y contraataques más peligrosos del Milán, sin frutos, harían que el 1-1 predominara en el marcador hasta el final del cotejo.

Un empate que puede ser productivo, si lo miramos desde la condición de visitante, pero, en la prensa y posiblemente en la fanaticada culé, dejo ciertas dudas en una semana donde se juega nada más y nada menos que el clásico de España.

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