Los juegos de fantasía y sus dilemas
A muchos de los que nos apasiona el fútbol, en algún momento de nuestras vidas nos ha llamado la atención (si es que no nos hemos vuelto adictos) los juegos de fantasía de fútbol. ¡En lo que hemos caído!
Para aquellos que no se sientan familiarizados con el término, permítanme hacerles una breve explicación: Un juego de fantasía, comúnmente llamado “Fantasy” trata de una simulación de director técnico, en el que, con un presupuesto (que muchas veces querrás que sea más amplio) debes armar un equipo de fútbol en donde tengas, en la mayoría de los casos, 3 delanteros, 5 mediocampistas, 5 defensas y 2 porteros. ¿Bien? pues espera, que se complica.
Cuando por fin logras armar tu equipo, quedando en 0,0 en dinero disponible. Elijes tu alineación. Lo bueno o lo malo, es que tu tendrás puntos en la medida en el que esos jugadores en la vida real lo hagan bien y, perderás puntos cuando jueguen mal.
He aquí el primero de nuestros dilemas, honor y gloria cuando un jugador se sacó 2 goles y otro 2 asistencias. Terror cuando un jugador es expulsado o falla un penalti ¡cólera! No tanto por lo que ha dejado de hacer el futbolista, sino que pierdes puntos en la liguilla que tienes con tus amigos.
A veces, recurrimos a la bajeza de poner al mejor jugador de nuestro acérrimo rival en la vida real como capitán, para que nos dé más puntos y ¿que creen? lo hacen. ¡Que mal que me siento! dice un culé cuando Cristiano ha hecho 30 puntos para el y ¡Que nadie se entere! exclaman aquellos que tienen a Messi como único punta y son del Madrid.
Definitivamente, el fantasy puede sacar el lado oculto de los fanáticos. Pero, sea como sea, jugar al fútbol de fantasía es de las mejores cosas que puede ofrecernos el fútbol. Te invito, en los inicios de temporada a crearte uno y con amigos disfrutar … o sufrir.
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